Carta de una madre
- AMPA
- 7 dic 2015
- 3 Min. de lectura

Desde que empezamos la complicada tarea de buscar cole para nuestra hija, hemos dado muchas vueltas a lo que creemos que es importante para ella. Porque eso es lo que hacemos cuando somos padres, hacer lo que pensamos que es mejor. Puede que muchas veces nos equivoquemos, pero nadie nos ha enseñado a ser madres o padres....
Puede ser que lo más importante sea aprender inglés, matemáticas o lengua. Quizá todo eso le ayude a ser una buena profesional, a sacar muy buenas notas, a ser una buena estudiante....per
o nos planteamos si realmente eso es lo importante a los tres años y decidimos que no! Porque todo eso nos prepara para un futuro que no sabemos cual es y ahora, creemos que es más importante jugar y ser felices.
Pero, puestos a pensar en el futuro, si tan importante es el inglés y las matemáticas, porqué no debería ser igual de importante saber escuchar, ser solidarios, aprender a convivir con personas de otras nacionalidades, ¿acaso eso no nos prepara también para el futuro? ¿Acaso pensamos que nuestros hijos, cuando sean mayores, van a vivir en un lugar donde no haya gente diferente, que hable otros idiomas o que tenga otras creencias? ¿y no deberían estar listos para aceptar y entender que todos tenemos los mismos derechos seamos de donde seamos?
Sí, para las matemáticas existen manuales. También para la lengua, el inglés, para ciencias....¿pero para la tolerancia, para el respeto, para la solidaridad? No, eso se aprende en casa y cuando nuestras hijas e hijos tengan 30 años necesitarán más el respeto que el inglés. Porque cuando tengan que emigar a Inglaterra y tengan un jefe polaco necesitarán más que un idioma para entender lo que pasa.
Y, después de un año en el Goya, sabemos que no nos hemos equivocado. Mi hija, además de las clases de inglés, tiene una amiga que le enseña rumano (puede que en un futuro, ese que tanto nos preocupa a todos, vivamos el Rumania); en nuestra clase hay chinos, dominicanos, niñas de la India y por supuesto, españoles. Somos un modelo de respeto, de tolerancia y de cariño hacia los demás.
También nos emociona ver todas las mañanas a la directora del colegio en la puerta recibiendo a las familias. Nuestra secretaria sabe todos los nombres de los niños y las niñas del cole. Nuestra jefa de estudios se disfraza de cohete...detalles de un cole diferente....
Están quienes dicen que las instalaciones de Goya dejan mucho que desear....pues sí, y las de los parques públicos, y las de la sanidad pública, y las de todos los servicios públicos....y qué? ¿has visto a tu hijo jugar con una hoja de papel? ¿lo has visto disfrutar con un palo? Sí, dejan mucho que desear y son felices convirtiéndolas en maravillosos aviones o espadas....., pero....¿has pasado de las puertas del cole? ¿ has sido capaz de ir más allá de tus prejuicios? ¿sabes qué proyecto educativo tiene el centro?....Entonces, ¿crees que puedes pasar por la calle y juzgar todo el trabajo de un equipo sólo porque no te gusta el patio?
Como familia, también nos hemos enriquecido mucho. Hemos abierto nuestras vidas a gente maravillosa que nos enseña cada día cosas nuevas que tú, por no pasar de la puerta del cole, te estás perdiendo. ¿Acaso piensas que una persona que ha nacido en otro pais no tiene nada que aportarte a tí? ¿crees que tu vida es más interesante? ¿crees que una madre de Perú no quiere lo mismo para sus hijos que tú?
En casa queremos que nuestra hija sea feliz. Y el colegio Francisco de Goya, ha hecho todo lo posible para que así sea durante este curso. Por supuesto que también sabe palabras en inglés, escribir las letras y los números, sabe leer su nombre y dibujar casas con triángulos...(sabe lo mismo que una niña que ha ido a otro cole, de eso no te quepa duda) pero además, tiene nuevas amigas, sabe que todos tenemos los mismos derechos, sabe que hay otros colores de piel y otros idiomas.....y sabe que en casa aceptamos las diferencias y entonces sabe que siempre la vamos a aceptar como es.
Gracias a todo el equipo del Goya por hacer que nuestra hija sea tan feliz. Gracias por todas las horas extras, por todos los colores de los pasillos, por los museos del gimnasio, por los cohetes goyetes, por los mandalas, por la avenida de la lectura, por la navidad. Gracias por querer estar ahí.
Estamos muy orgullosos de vosotros. Gracias por ser el mejor colegio del mundo para nuestra hija.
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